Cabalgada en Mestalla

 Qué divertido es el fútbol. Cuando ganas, claro. Hoy es uno de esos días en los que el madridismo se siente muy orgulloso de su equipo. En primer lugar, hay que agradecer a los compañeros de Superdeporte la dosis extra de motivación que necesitaban los jugadores del Real Madrid: una nueva portada lamentable a añadir a la lista. Luego lo que genera violencia es el bailecito de Cristiano o las carreras de Mou, evidentemente. El Madrid logra un triunfo vital, en una semana complicada por el cansancio físico, derivado de la semana de selecciones.

Las bajas obligaron a Mourinho a recomponer el esquema táctico. Pudimos ver el mismo once inicial que encarrilló la eliminatoria de semifinales de Copa en el Sánchez Pizjuán, con la inclusión de las 2 alas del trivote - Lass y Khedira - y Xabi Alonso llevando la manija un poco más retrasado. Hicieron un partidazo los tres. Quizá Xabi pagó el sobreesfuerzo al que le somete Del Bosque en cada convocatoria de España. Tendrá minutos de descanso el martes. Los de Mourinho controlaron el tempo del partido durante la primera mitad sin problema alguno, con la debida mención especial al señor Karim Benzema. Qué movimientos, qué capacidad de asociación con CR7 y Özil. Tremendo. El control y la definición en el gol son de un genio. El pase de Alonso es buenísimo, pero el latigazo del francés con la zurda es una obra de arte.

El Madrid se vino abajo físicamente en la segunda mitad. La lesión de Arbeloa complicó mucho las cosas, sobre todo por el bajo rendimiento de su sustituto - Albiol - en el lateral derecho. El Madrid agradeció gustosamente que el encuentro entrara en el terreno del otro fútbol. Tino Costa perdió los papeles en una acción con Lass, mientras que Jordi Alba intentó provocar la expulsión de Özil con dos piscinazos marca de la casa. El árbitro se contagió de la vorágine del partido y sacó tarjetas amarillas a diestro y siniestro. Cuando más ahogado estaba el Madrid, emergió la figura de Cristiano Ronaldo. Carrera de 40 metros que provoca un córner, el cual a la postre supondría el 0-2 de Sergio Ramos. Y tras el zapatazo de Soldado que recortaba distancias, el portugués salva la salida de Diego Alves y define casi sin ángulo ante la oposición de Albelda.

Mourinho celebró el gol de Cristiano de una forma un tanto peculiar: cual jinete a los lomos de Callejón. Sin embargo, la alegría casi termina en tragedia. La relajación defensiva, con Marcelo a la cabeza, propició un nuevo gol de Soldado. Los últimos minutos fueron de infarto. En la última jugada del encuentro, Rami remata de cabeza al larguero y el rechace acaba sacándolo Higuaín con el pecho. El curioso movimiento del argentino incita a pensar que es una mano clara, pero en el siguiente vídeo se ve como despeja con la parte baja del pecho.

Nueva victoria clave, en otro estadio en el que el Barcelona se dejó dos puntos, que sirve para mantener la ventaja. A pesar de que los culés han disputado dos encuentros más que el Madrid en su propio feudo. El martes espera un partido de rotaciones en Champions con el único fin de llegar en las mejores condiciones al derby del próximo sábado.

Valencia 2 - Real Madrid 3; Benzema, Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo

Casillas (2), Arbeloa (2), Pepe (3), Sergio Ramos (3), Marcelo (1), Alonso (3), Khedira (2), Lass (3), Özil (2), Cristiano Ronaldo (3), Benzema (3), Albiol (0), Higuaín (1), Granero (1)

Mejor jugador del partido: Sergio Ramos

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