La redención de Cristiano

La Moviola de Rafanomejodas

Hay goles que marcan temporadas, ya sea para pasar una eliminatoria o certificar un campeonato. El tanto de Cristiano es mucho más que eso. La belleza del gol es colosal; un disparo seco al palo largo, imposible para Munúa. Pero a pesar de lo dicho por Mourinho en rueda de prensa, ese tanto no va a recorrer el mundo. Lo más destacado del encuentro es la imagen de la celebración. Una estampa tan mourinhista, que a más de uno le ha puesto la piel de gallina. Simboliza la unión del grupo, la ventaja sideral en Liga frente al Barcelona y el apoyo total a José Mourinho. Cualquier persona de bien habría ido a abrazarse con el entrenador portugués. Todos los artículos que se han escrito denostándole -la campaña continúa- han hecho más emotivo el acto de alegría, de un gol que supone una victoria importantísima para el devenir del campeonato liguero.

La mejor noticia para el Madrid es que gana cómodamente los partidos jugando a medio gas. Sin profundidad por banda, ausencias de Marcelo y Di María mediante, se encomienda a la magia de un Özil diabólico. La ayuda de Iborra liberó más problemas de los previstos, sobre todo por el buen de hacer del delantero marfileño Koné. Partidazo de manual del jugador africano, con Pepe y Ramos viéndolas venir por todas partes. Pude felicitarle personalmente por su gran encuentro en zona mixta, aunque se marchó apesadumbrado a casa al comunicarle la derrota de Costa de Marfil en la Copa África. Historias del fútbol. Cumplió él y el Levante. El único punto de discordia fue, como siempre, Ballesteros. "Ídolo" per secula seculorum de la afición madridista.

Cristiano sumó un nuevo hat trick: desde el punto de penalti, tras remate de cabeza y de zapatazo antológico. El Bernabéu coreó su nombre por segunda vez en un mes; las únicas en su ya tercera temporada como madridista.  La afición que acude a Chamartín todas las semanas está, en su mayor parte, 'raulizada'. Es decir, valora más el esfuerzo y el trabajo en su máximo extremo que unas excelentes cualidades ofensivas. Lo sufrió Ronaldo Nazario en sus propias carnes, al igual que hasta hace unas semanas Cristiano. El cambio es bien sencillo: el portugués comenzó a ayudar en tareas defensivas. Ahí claudicó el Bernabéu.

El encuentro tampoco dejó muchas más conclusiones. Quizá, para mí, los problemas en estático que producen no tener un nueve puro en la plantilla. Granero y Xabi mueven muy bien la pelota, en cuanto a nivel de criterio, pero la velocidad de ejecución deja muchísimo que desear. En el tiempo que tardan en darse la vuelta ya se han escrito desde El País' diez artículos contra Mourinho. Benzema cerró la goleada con un tanto que hace honor a su infinita clase.

El conjunto de Mou tiene en su mano cerrar y dar carpetazo a la Liga en las dos próximas semanas. Las salidas del Barcelona no son nada benévolas, mientras que el Madrid debe poner sus miras en la Champions. Todo ello es una encrucijada para Pep; si cede en uno de los frentes, se le irá uno de los dos títulos. Aunque ya sabe de puertas para dentro que la Liga empieza a tener color blanco.

Real Madrid 4 - Levante 2. Cristiano Ronaldo (3) y Benzema. Cabral y Koné.

Casillas (1), Arbeloa (2), Pepe (1), Ramos (1), Coentrão (1); Alonso (2), Granero (2), Özil (3); Cristiano (3), Benzema (2), Higuaín (2); Callejón (1), Kaká (1), Khedira (-)

Mejor jugador del partido:  Cristiano Ronaldo

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